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domingo, 2 de diciembre de 2018

¿Qué efectos tiene la polución en nuestra piel, y cómo combatirlos?

Yessica


Como hemos mencionado en otros posts la contaminación es una realidad que nos afecta a todos, a niveles que incluso desconocíamos. 
Desde hace un tiempo atrás la polución ha ganado protagonismo entre las grandes marcas de belleza y que se empieza a dar sobre todo en las grandes ciudades donde los niveles de contaminación son mucho más altos.
Ya sabemos los efectos que la contaminación está teniendo en nuestro entorno pero quizás aún no conocías los efectos que están teniendo en nuestra piel.
Un tema bastante serio si tenemos en cuenta que nuestra piel es el órgano más grande que tenemos, cuya función es protegernos del exterior, es decir servirnos de barrera contra cualquier agente nocivo que nos pueda dañar. Además nuestra piel está constituida por varias capas que van desde la más interna hasta la más exterior: la epidermis, la dermis y la hipodermis. La epidermis será la capa más superficial que tenemos y que por tanto es más vulnerable de sufrir daños.
Con todo esto podemos concluir que la piel forma una parte fundamental de nuestro organismo y para que pueda llevar a cabo su función (protegernos) es importante que no sufra ningún daño. Por ello, debemos de darle un ciudado especial y protegerla.
La contaminación y nuestra piel
La polución es la contaminación del medio ambiente que se produce debido a la actividad humana, ya sea a nivel industrial como a nivel biológico. Y que por tanto se agravará aún más en núcleos urbanos, es decir en las grandes ciudades.
Entre los posibles daños, encontramos el contacto en el que se encuentra nuestra piel a numerosos gases que pueden dañarla o producir reacciones perjudiciales como el estrés oxidativo. 
A primera vista, el efecto más inmediato de la contaminación es que nuestra piel se ensuaciará, y por tanto pueden aparecer poros obstruidos, exceso de grasa y disminución de la renovación celular pues se eliminaran menos células muertas. 

Pero también podremos tener una piel mucho más apagada debido a que la polución obstruye el intercambio de nuestra piel con sustancias naturales como el agua. Además de que podremos padecer de resequedad de la piel, manchas o un mayor riesgo de envejecimiento prematuro.

¿Cómo cuidar nuestra piel contra la contaminación?


Como hemos dicho anteriormente la polución supone un agente nocivo para nuestra piel. Puede provocar problemas cutáneos como la disminución de la elasticidad de la piel, sequedad cutánea, manchas en la piel, arrugas, piel más apagada, eczemas, acné, producirnos alergias o irritación y rojeces.
.Ahora bien qué podemos hacer para proteger a nuestra piel contra esta afección. El primer paso consiste básicamente en la limpieza de la piel, un acción primordial sobre todo para todas aquellas personas que vivan en las grandes ciudades, donde los niveles de polución son mucho más altos.
Así tendremos que distinguir entre una limpieza de día y una de noche. Para la diurna tendremos que realizar una limpieza más suave, sobre todo si tienes piel sensible o seca. Lo ideal sería utilizar un limpiador suave que no arrastre en profundidad las células de nuestra piel, pues esto dejaría nuestra piel más desprotegida contra los agentes externos. Mientras que si tienes piel grasa sí tendrán que disponer de un limpiador un poco más agresivo, pues debido al exceso de sebo tendrán que eliminar las células muertas que pueda obstruir los poros y por tanto, producir aún más sebo.


Sin embargo, la limpieza noctura será para igual para todo tipo de pieles y se basará en una limpieza a profundidad. En primer lugar, tendremos que utilizar agua micelar, aceites o leches desmaquillantes si hemos utilizado maquillaje. Ya hora vendría el paso del limpiador facial, el cual debemos acompañar de un masaje circular por el rostro y aclarar con abundante agua. Como venimos diciendo la polución nos ensucia más la piel por lo que tendremos que utilizar cepillos faciales para limpiar en mayor profundidad aquellas zonas con tendencia a acumular más grasa como es la zona T.
Una vez hecha la limpieza podemos utilizar algún tónico que elimine los posibles residuos de los productos anteriores y que nos ayudará a calmar la piel si se nos ha irrritado.

Aunque la limpieza se haya llevado a cabo y hayamos eliminado las sustancias superficiales derivadas de la polución, es posible que algunas de ellas hayan podido penetrar en la piel. Por eso, debemos de emplear complementos que nos ayudan a combatirlos como los antioxidantes, la vitamina C y productos con función detox.  
Por otro lado, la polución no solo nos afecta a través de estas sustacias presentes en el ambiente sino que también tiene puede producir daños más perjudiciales debido a los rayos solares. La contaminación afecta a la capa de ozono, reduciéndola, por lo que demos de tener especial cuidado con estas filtraciones que pueden producirnos manchas en la piel. Por eso, demos de utilizar una buena hidrante que fortalezca la piel, y para ello debemos elegir aquellas que incorporen ácido hialurónico u otros como Vitamina E. Además de utilizar siempre protector solar, e hidratarnos desde dentro bebiendo mucha agua e infusiones como el té verde o la ortiga.




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